Uso estratégico de datos en ciudades inteligentes
El desarrollo urbano sostenible y eficiente es una propuesta de gran valor para las ciudades en todo el mundo, especialmente en países de América Latina que tienen sus propios desafíos a superar para avanzar hacia las ciudades inteligentes.
En este escenario, la capacidad de recopilar, analizar y utilizar datos de manera inteligente transforma la gestión de las administraciones, mejorando los servicios públicos, la movilidad, la seguridad y la calidad de vida de los ciudadanos.
Después de todo, hay una correlación esencial entre la recopilación y análisis de datos, la infraestructura disponible y la integración de sistemas que se utilizarán para orquestar las ciudades inteligentes y alcanzar su máximo potencial. Esto hace posible que se vuelvan más proactivas ante las necesidades de los habitantes y así solucionar problemas urbanos.
Datos en ciudades inteligentes: la base de la inteligencia urbana
El uso de datos en ciudades inteligentes refleja una tendencia creciente en todo el mundo para hacer que las áreas urbanas sean más habitables, seguras y eficientes.
La integración de la tecnología en la gestión urbana abre un abanico de posibilidades para satisfacer las necesidades específicas de cada comunidad, transformando la forma en que interactuamos con los espacios urbanos.
Vamos a explorar algunos de estos aspectos en detalle, enfocándonos en la importancia del capital humano, la seguridad pública y el uso de datos para la toma de decisiones.
Capital humano y innovación
La capacidad de una ciudad para convertirse en un hub de innovación está directamente ligada a su habilidad para atraer, formar y retener talento. Por ejemplo, al invertir en la formación de profesionales calificados y en la creación de un ecosistema favorable a la innovación, una ciudad de la NEC en América Latina, en el país Brasil, establece un ciclo virtuoso que beneficia tanto a la economía local como a la calidad de vida de sus habitantes.
La presencia de universidades, incubadoras de startups y eventos tecnológicos son indicadores de un ambiente que valora el conocimiento y la creatividad, elementos esenciales para la solución de problemas urbanos complejos.
Seguridad pública y monitoreo
La aproximación de la región hacia la seguridad pública, utilizando la monitorización por vídeo analítico y un extenso sistema de cámaras, es un ejemplo claro de cómo la tecnología puede ser aplicada para crear entornos urbanos más seguros.
Este análisis inteligente de imágenes no solo posibilita la vigilancia en tiempo real, sino también la posibilidad de prever y prevenir incidentes antes de que ocurran. Ante esto, la integración de estos datos con otras fuerzas de seguridad fortalece la sensación de seguridad y la eficacia de las respuestas a incidentes.
Uso de datos para la toma de decisiones
La capacidad de recopilar, analizar y aplicar datos es crucial para la gestión eficiente de una ciudad inteligente. Vale la pena mencionar el ejemplo de la predicción de plazas en guarderías y la promoción de servicios de salud, que permite una toma de decisiones más proactiva.
El desarrollo de un centro de monitoreo que integre cuidado urbano, seguridad, recolección de residuos, energía y movilidad urbana en una sola plataforma es uno de los muchos ejemplos de iniciativas que pueden representar un paso significativo hacia una gestión urbana más holística y eficiente.
La adopción de un enfoque centrado en el ser humano, que considere las necesidades y el bienestar de los ciudadanos, será esencial para el éxito continuo de las ciudades inteligentes, lo que incluye factores como el crecimiento poblacional, el desplazamiento del personal policial, la iluminación pública, entre otras soluciones.
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Rumbo a ciudades más inteligentes y resilientes
El desarrollo de ciudades más inteligentes tiene un aliado poderoso: el Internet de las Cosas (IoT). En una entrevista para Start Eldorado, episodio 291, Elias Reis, especialista en ciudades inteligentes de NEC, compartió cómo esta tecnología puede ser catalizadora para la transformación urbana.
A través de la IoT, es posible generar datos cruciales que ayudan a las autoridades a optimizar los servicios urbanos y a responder de manera más eficaz a diversas situaciones. Todo esto con enfoque en economía y eficiencia.
Conectividad y aplicaciones de IoT
El punto central de la discusión es la necesidad de entender cómo interactúan entre sí los dispositivos conectados. Esto se aplica en varios escenarios urbanos, como:
- Tráfico: vehículos conectados y el monitoreo del tráfico en tiempo real sirven para mejorar la movilidad urbana, notificando sobre accidentes y la necesidad de mantenimiento de los vehículos;
- Hogares inteligentes: el monitoreo del uso de energía y de los patrones de iluminación en las casas puede extrapolarse para optimizar el consumo energético a escala urbana, resultando en ahorro para los ciudadanos.
Gestión de eventos naturales
Uno de los ejemplos más impactantes discutidos por Reis es el uso de la IoT en la gestión de eventos naturales, como vendavales e inundaciones.
La capacidad de monitorear patrones climáticos y prever eventos adversos permite que las ciudades se preparen mejor para mitigar sus efectos, potencialmente salvando vidas y reduciendo daños materiales. Algo necesario ante la perspectiva de un clima más extremo y con mayores variaciones de temperatura que, por consecuencia, aceleran la aparición de este tipo de eventos.
Datos: el corazón de las ciudades inteligentes
Reis enfatiza que "los datos son la base de una ciudad inteligente". La recolección y análisis de datos a través de IoT posibilitan una gestión urbana más informada y proactiva. Sin embargo, antes de cosechar los beneficios, es crucial integrar y orquestar las tecnologías involucradas, permitiendo una toma de decisiones más eficiente y la optimización de los recursos urbanos.
La interconexión entre la recolección y análisis de datos, la toma de decisiones consistentes, la infraestructura tecnológica avanzada y la integración de diversos sistemas es esencial para impulsar el desarrollo de ciudades más inteligentes y eficientes.
En este contexto, el uso estratégico de datos emerge como un pilar fundamental, impulsando no solo la optimización de recursos y servicios urbanos, sino también la prevención y gestión eficaz de desafíos y crisis.
NEC, con su experiencia global y conocimiento específico de las necesidades de las ciudades de América Latina, está a la vanguardia de este movimiento, desarrollando proyectos personalizados que apoyan y fortalecen las redes de ciudades inteligentes en la región, demostrando su compromiso en crear entornos urbanos más adaptables, resilientes y sostenibles para el futuro.
