El avance de la inteligencia en las últimas décadas ha transformado diversos sectores, y la gestión de redes no es una excepción. Con la creciente complejidad de estas estructuras y la demanda de operaciones cada vez más eficientes, la IA surge como una solución eficaz para enfrentar los desafíos diarios. A menudo, los profesionales de TI se enfrentan a situaciones que pueden comprometer toda la experiencia de los usuarios al depender de:
Enfoque reactivo: la falta de proactividad puede llevar a problemas no detectados que, al acumularse, resultan en fallos más críticos;
- Error humano: la intervención manual en entornos complejos aumenta el riesgo de tomar decisiones erróneas, lo que compromete la estabilidad de la red;
- Problemas de escalabilidad: con el crecimiento exponencial de los datos y dispositivos conectados, gestionar la demanda actual y las perspectivas para los próximos años puede representar un área incierta.
Estos factores dificultan la visión general de la infraestructura de red y reducen la capacidad de respuesta rápida ante situaciones operativas y estratégicas.
De acuerdo con un informe de Gartner, el 72% de los encuestados ha automatizado menos del 25% de sus actividades de red, y solo el 10% ha alcanzado una automatización superior al 51% de las actividades.
Sin embargo, hay un creciente interés en la adopción de AIps, reflejado en la posición de la AI Networking en la cima del Networking Hype Cycle anual de Gartner. Además de esta tecnología, la consultora prevé que los asistentes de IA de red (Network AI Assistants) también tendrán un pico inflado de expectativas en los próximos 2 a 5 años.
Hype Cycle for Enterprise Networking, 2024 – Gartner
Esto es uno de los muchos indicios que destacan la relevancia de la inteligencia artificial en el contexto actual de la gestión de redes y apunta a una transformación significativa en la forma en que se llevan a cabo las operaciones.
Cómo la inteligencia artificial está transformando la gestión de redes
La implementación de la IA en la gestión de redes está redefiniendo la forma en que se llevan a cabo las operaciones, optimizando procesos y facilitando la adopción de iniciativas modernas y eficientes.
Al integrar IA, las redes se vuelven más inteligentes y adaptativas, capaces de manejar la creciente complejidad y responder rápidamente a incidentes.
A continuación, exploramos algunos de los principales beneficios que la IA aporta a la gestión de redes:
Monitoreo eficiente de la red
La inteligencia artificial permite un monitoreo continuo y en tiempo real de las redes, identificando anomalías y patrones que podrían indicar problemas potenciales.
A diferencia de los enfoques tradicionales, que dependen de alertas basadas en reglas fijas, los sistemas de IA aprenden de los datos históricos y ajustan automáticamente sus algoritmos para detectar fallos con rapidez.
Esto significa tener una visión más precisa y predictiva del estado de la red, con el fin de minimizar el tiempo de inactividad y mejorar la calidad del servicio.
Sistema de seguridad mejorado
La seguridad de las redes es una de las áreas más críticas para cualquier organización. La IA contribuye significativamente a la seguridad al detectar comportamientos anómalos e identificar amenazas emergentes en tiempo real.
Con la capacidad de analizar grandes volúmenes de datos y correlacionar eventos que podrían pasar desapercibidos por métodos tradicionales, la IA fortalece la protección contra los ataques cibernéticos. Además, permite respuestas automáticas y casi instantáneas ante amenazas, mejorando la resiliencia de la red y reduciendo el impacto de posibles incidentes.
Automatización de tareas
La automatización de tareas, impulsada por la IA, alivia la carga de trabajo de los profesionales de TI al automatizar procesos repetitivos y demorados, como la configuración de dispositivos, la gestión de políticas de red y el monitoreo del rendimiento.
Al eliminar la necesidad de intervención manual en tareas rutinarias, la IA reduce el riesgo de errores humanos y libera a los especialistas para que se concentren en actividades más estratégicas. Con esto, las operaciones de red se vuelven más ágiles y escalables, lo que facilita la adaptación a nuevas demandas.
Mantenimiento predictivo del sistema
La inteligencia artificial también está transformando el mantenimiento de redes con capacidades predictivas. En lugar de seguir ciclos de mantenimiento reactivos o preventivos que pueden no ser tan eficientes, la IA permite el mantenimiento predictivo (que predice fallas antes de que ocurran).
Analizando patrones de uso, rendimiento de los equipos y datos históricos, la IA identifica señales de desgaste o fallos inminentes, con el fin de estimular intervenciones antes de que los problemas afecten la operación.
Este enfoque no solo prolonga la vida útil de los equipos, sino que también optimiza los costos operativos al reducir la necesidad de intervenciones de emergencia
Transforme la gestión de su red con NEC
En el escenario competitivo actual, los operadores de red necesitan tener una visibilidad completa e integrada del entorno, para facilitar la detección y corrección de problemas antes de que impacten la operación, afectando directamente su rendimiento y capacidad de recuperación.
Una de las principales dificultades es la necesidad de automatización con monitoreo inteligente y la optimización del rendimiento de la red. La solución de Full Stack Observability de NEC ofrece un enfoque robusto de observabilidad con información detallada sobre la salud y el rendimiento de la red.
Esto permite una gestión más ágil y automatizada, que facilita la detección proactiva de problemas y el ajuste dinámico de recursos. Al aprovechar estas capacidades, los operadores de red pueden mejorar la eficiencia y reducir el tiempo de inactividad, garantizando un servicio más confiable para sus clientes.
La solución de NEC ayuda a optimizar esta transición hacia GPON (Red Óptica Pasiva de Gigabit), con una integración eficiente de nuevas tecnologías con las redes existentes, sin comprometer la calidad del servicio ni aumentar drásticamente los costos operativos.
Con esto, es posible tener una visión completa e integrada del tráfico de la red, facilitando la previsión de dónde invertir en infraestructura.
André Vianna, Ingeniero de Preventa de NEC, destaca: “Con un equipo de arquitectos y desarrolladores, junto con la experiencia en redes IP, NEC puede ayudar al cliente CSP o Enterprise en toda la jornada de automatización, desde las etapas de planificación, trabajando con el cliente para comprender los procesos operativos rutinarios y repetitivos, la recopilación de requisitos y, finalmente, actuar en el flujo de desarrollo para automatizar la red.”
Con la implementación de las soluciones de NEC, el sector de operadores puede planificar un futuro más competitivo y sostenible. Las tecnologías de automatización, monitoreo inteligente y mantenimiento predictivo serán cada vez más esenciales para satisfacer las crecientes demandas de los consumidores y del mercado.
Contáctenos y comprende mejor nuestra solución.
