Descubra las tecnologías de redes móviles privadas que marcarán la pauta para Agro 4.0
El calentamiento global tiene impactos significativos en varios ámbitos, siendo la agricultura una de las principales afectadas, con pérdida de productividad e incertidumbre respecto de las cosechas. Afortunadamente, el avance tecnológico, particularmente el digital y la movilidad, trae recursos cruciales para que los profesionales del campo puedan superar las adversidades y asegurar la continuidad de su producción, algo fundamental para la sociedad nacional y global.
De acuerdo a United Nations, la agricultura en su nueva fase altamente tecnificada, conocida como Agro 4.0, juega un papel importante en el futuro de los países. Se estima que el sector representará el 24,5% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2023. Además, datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura muestran que habrá un aumento del 70% en la demanda mundial de alimentos para 2050. .
Dado el peso de este sector, la transformación digital ha llegado al campo, trayendo importantes mejoras e innovaciones que permiten mayor control, visibilidad y efectividad en la siembra, cultivo y cosecha.
Esta realidad ha sido habilitada con la implementación de redes privadas móviles y privadas 5G en el campo, permitiendo a los agricultores tener conexiones estables con alto soporte para la recolección, transporte y procesamiento de grandes volúmenes de datos necesarios para automatizar los procesos agrícolas.
A continuación se agruparon tres puntos particularmente importantes, que tienen el potencial de incrementar la productividad agrícola y optimizar esta actividad de esencial importancia para el país:
Uno de los principales aliados del agricultor es la capacidad de ver los detalles del campo, como áreas que requieren mejor riego, ciertos nutrientes, pesticidas agrícolas específicos (como fungicidas, insecticidas y herbicidas), y mucho más. Esto permite evitar la pérdida de plantas y, en consecuencia, optimizar la producción, además de evitar el desperdicio de insumos y hacer más preciso el mantenimiento de la cosecha.
Al instalar sensores de diferentes tipos, los agricultores consiguen tener un mayor control sobre sus cultivos, pudiendo actuar de forma preventiva, con más seguridad en sus decisiones y más control sobre su propia actividad. Esto es esencial para compensar los efectos del cambio climático, que socavan la eficiencia de la siembra y la cosecha.
Los beneficios de la inteligencia artificial ya son bien conocidos en varios aspectos y sin duda tendrán importantes impactos en Agro 4.0. Cuando se combinan con sensores, los programas basados en inteligencia artificial pueden realizar análisis detallados en tiempo real de varios aspectos importantes de la plantación, desde el estado del suelo hasta el crecimiento y la salud de las plantas.
Con una capacidad de análisis mucho más profunda que la humana, las soluciones con este recurso pueden prevenir pérdidas y maximizar la supervivencia de las plantas y, en consecuencia, la rentabilidad de cada cosecha.
Otro recurso importante es la capacidad de orquestar varios factores simultáneamente, como equipos de agricultores, ingenieros, mantenimiento de equipos, que actúan de manera coordinada y con más sinergia, obteniendo más resultados. Con esto, es posible automatizar diversas tareas, como riego y dispersión de pesticidas, obtener información sobre mejoras en el cultivo de plantas, identificar y prevenir problemas, y mucho más.
Un ejemplo de esto es el CropScope, una solución de NEC que combina inteligencia artificial y recursos de análisis para acercar la automatización de actividades rutinarias e información importante a ingenieros y administradores con el objetivo de facilitar y optimizar sus actividades y principalmente como herramienta para la toma de decisiones.
La generación de imágenes de alta precisión del campo es una herramienta de generación de datos que, utilizada de forma independiente o en conjunto con las ya mencionadas, puede proporcionar información importante sobre puntos cruciales en las áreas de siembra. Desde allí, los administradores pueden ver claramente zonas con déficit de nutrientes y agua, posibles brotes de enfermedades y plagas y otras cuestiones esenciales para este sector.
Estas y muchas otras soluciones han estado cambiando la forma en que se llevan a cabo las actividades en los agronegocios. Con esto, Agro 4.0 se convierte en una realidad en el campo, permitiendo controlar y gestionar grandes plantaciones de una manera mucho más eficiente y optimizada – y en tiempo real.
Un escenario ideal para el desarrollo de ecosistemas conectados y preparados para afrontar situaciones y desafíos adversos en el campo, aportando innovación sin degradar el medio ambiente y contribuyendo al desarrollo sostenible de las empresas y la economía del país.
Al combinar tecnologías que permiten brindar más inteligencia y conectividad en el campo, NEC apunta a orquestar la innovación en todas las etapas de la siembra de Agro 4.0 y fortalecer la vida diaria de las personas que lo rodean.
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