La sustentabilidad es un tema crítico para el futuro de nuestra sociedad, y la tecnología está en el centro de este asunto.
La sustentabilidad ha pasado de ser una ventaja competitiva de algunas organizaciones selectas a ser un tema crucial en la gestión tanto privada como pública, con un impacto directo en el futuro de la sociedad global. Dado que es un tema amplio con una serie de ramificaciones e implicaciones específicas para cada sector, las organizaciones han buscado encontrar algunos conceptos comunes que puedan guiar las acciones para todo tipo de organización.
Un gran paso en este sentido fue dado por la ONU a través de sus Objetivos de Desarrollo Sustentable y, en particular, mediante el establecimiento del llamado ESG, a través de una publicación colaborativa llamada "Who Cares Wins" en 2004.
Esencialmente, esta publicación reunió tres puntos fundamentales en organizaciones tanto privadas como públicas: sustentabilidad ambiental, social y gobierno. A partir de este concepto, es posible determinar si una organización es socialmente consciente y gestionada de manera correcta.
Dado que las ciudades son responsables de aproximadamente el 70% de las emisiones de carbono anuales, NEC aplica su tecnología en la creación de soluciones que ayuden a orientar la gestión municipal, sus herramientas para la formación de las llamadas ciudades inteligentes operan en campos que van desde la identificación de personas hasta la gestión del medio ambiente, y ayudan a los administradores locales a tomar decisiones mejores, más rápidas y precisas.
Las ciudades inteligentes tienen como principal objetivo construir espacios centrados en el bienestar y la calidad de vida de las personas, donde la tecnología está diseñada para centralizar una relación mucho más armoniosa con los centros urbanos.
Estas soluciones respetan los principios del ESG y, por lo tanto, es posible entender que son catalizadores del desarrollo de las ciudades inteligentes. Veamos cómo operan en los tres pilares del ESG:
La adopción de recursos como la red inteligente ayuda a crear una imagen precisa en tiempo real del consumo y la distribución de energía en la trama urbana, generando un panorama claro del suministro de hogares y empresas. Esto es crucial para identificar fallas en el sistema de distribución, así como investigar áreas con consumo atípico, zonas que requieren una mayor inversión en este asunto y mucho más.
Además de garantizar un suministro consciente y efectivo de energía y permitir el crecimiento de las ciudades. Con la llegada de la nueva era de vehículos eléctricos, esto será aún más relevante, ya que la movilidad urbana dependerá estrechamente de una distribución efectiva de electricidad.
Las ciudades inteligentes permiten una mayor participación de las personas en el uso y las decisiones sobre los espacios urbanos, lo que hace posible crear políticas de inclusión e inversiones. Específicamente, se pueden crear sistemas de monitoreo para identificar las necesidades de cada región y establecer sistemas de comunicación efectivos con cada comunidad, generando ideas relevantes para cada una y mejorando drásticamente la gestión urbana.
A través de la adopción del monitoreo regional, se facilita la gestión de la seguridad pública, saneamiento, tráfico, salud y mucho más, así como recibir comentarios más rápidos y precisos de los usuarios de los servicios públicos.
Con las personas teniendo más voz y herramientas para monitorear las decisiones gubernamentales, es responsabilidad del gobierno implementar sistemas que promuevan la transparencia, así como prácticas efectivas que aprovechen la tecnología de análisis de datos, IoT, 5G y mucho más. La gobernabilidad, por lo tanto, se convierte en un complemento del aspecto social de la gestión municipal, al establecer reglas claras de gestión y mostrar a las personas cómo los impuestos se convierten en servicios y cómo cada región se beneficia de los servicios municipales.
A través de análisis, monitoreo y sistemas de automatización y gestión mediante inteligencia artificial, los administradores municipales pueden reaccionar mejor ante incidentes y rendir cuentas con mayor certeza y transparencia, elevando el nivel de la administración pública y generando más resultados para todos.
Un ejemplo interesante de cómo la tecnología puede ser utilizada como medio para alcanzar objetivos de sustentabilidad es la ciudad de Oslo, la capital de Noruega. A través de políticas innovadoras y audaces para reducir las emisiones, es pionera en el mundo en este aspecto, siendo la primera en crear un sitio de construcción con emisiones cero, utilizando solo maquinaria eléctrica. Su ayuntamiento planea reducir la generación de gases nocivos en un 95% para 2030, y cuenta con recursos como los mencionados anteriormente para garantizar este logro notable y único a nivel mundial.
En la era de las ciudades digitales, es prácticamente imposible imaginarlas sin la inclusión de prácticas que buscan mejorar la calidad de vida de la sociedad, con infraestructuras resilientes, políticas públicas transparentes y redes de alta capacidad para conectar todo a nuestro alrededor.
Para otras ciudades que buscan seguir el camino verde NEC tiene el placer de poner a disposición su gran experiencia y sus soluciones de vanguardia. Como se ha visto, la tecnología es una aliada indispensable para los gestores públicos municipales, proporcionando visibilidad, inteligencia, velocidad e información valiosa para enfrentar los desafíos actuales, y NEC es una referencia en las soluciones más relevantes para ello.
Hable con nuestros expertos y descubra cómo podemos llevar su ciudad a la era de las ciudades inteligentes y llevar la sostenibilidad a su gestión.